Chinoy
Diego se dedicó a ponerle nombres nuevos a las cosas viejas.
Comenzó por la muralla. Le puso por nombre ventana y pudo ver a través de ella. Al frió le puso luz y vio el fondo del polo. A la noche tierra y caminó por las estrellas, a la felicidad la llamó conformidad y mostró a los hombres que podían volar. Llamó paz a la guerra y guerra a la paz para que la humanidad por fin entendiera su naturaleza. A la locura le puso razón y todos fueron libres. Alegría llamó a la lluvia para que danzáramos bajo la bendición del cielo, amor al desamor y salieron poema tremendos, cambió el nombre del egoísmo por ignorancia y de enfermedad por salud, entonces todos sonreímos con la existencia. A la vírgen la nombró como mujer y ésta pudo descansar, a mí me llamó escritor y pude ser dios.
1 comentario:
que bacán es diego!
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